Si observamos con atención, bajo el alero del tejado de la iglesia de Sant Miquel de Cladells descubriremos un friso decorado con toda una hilera de semiesferas incisas con una cruz griega. Es un elemento decorativo muy original que aporta una innegable personalidad a esta antigua iglesia parroquial románica, situada en un entorno montañoso a medio camino entre Santa Coloma de Farners y Sant Hilari Sacalm.

La iglesia, que debió de erigirse en el siglo x, ha llegado hasta la actualidad bajo el aspecto que le otorgó la reconstrucción total llevada a cabo en el siglo xii; solo unos añadidos laterales y el campanario lo han modificado. Se trata, por lo tanto, de otro ejemplo del interesante conjunto de iglesias románicas diseminadas por el macizo de Les Guilleries.