Amer
La población de Amer se encuentra en un pequeño valle entre las comarcas de la Selva y la Garrotxa, a medio camino entre Girona y Olot. La morfología de Amer viene determinada por el valle fluvial del Brugent y su desembocadura en el Ter, en la zona más llana de Sant Climent, bajo los riscos de Sant Roc.
El núcleo urbano de Amer se ha ido formando en torno al núcleo medieval del monasterio y del antiguo camino que comunicaba Girona y Olot. La plaza de la Vila, una plaza porticada cuadrangular, tiene su origen en el mercado medieval de la localidad. Los edificios y soportales, todos distintos, que la configuran actualmente son del siglo XIX y constituyen un elemento patrimonial de gran interés. De toda la trama urbana, destacamos la casa del Abad (Can Boles), Can Mont y Can Gasull, en el monasterio; Can La, en el barrio del Pedreguet; y Can Gultresa, en la plaza de la Vila. En cuanto a edificaciones monumentales, es imponente la Torre de Rocasalva o de Sant Climent, la iglesia de Santa Maria, con sus ábsides románicos, y la casa de Can Terme, donde se encuentra el MEd’A (Museo Etnológico de Amer), que alberga la colección permanente Lluís Sidera y salas para exposiciones temporales.
Finalmente, la población atesora un patrimonio arquitectónico ferroviario único en Cataluña, fruto de la importancia que había adquirido la estación de Amer en la Ruta del Carrilet de Girona a Olot. Esta estación se destina a equipamientos turísticos y de información ciudadana y juvenil. El edificio y sus anexos son el centro de la vía verde más extensa de Girona.
El núcleo urbano de Amer se ha ido formando en torno al núcleo medieval del monasterio y del antiguo camino que comunicaba Girona y Olot. La plaza de la Vila, una plaza porticada cuadrangular, tiene su origen en el mercado medieval de la localidad. Los edificios y soportales, todos distintos, que la configuran actualmente son del siglo XIX y constituyen un elemento patrimonial de gran interés. De toda la trama urbana, destacamos la casa del Abad (Can Boles), Can Mont y Can Gasull, en el monasterio; Can La, en el barrio del Pedreguet; y Can Gultresa, en la plaza de la Vila. En cuanto a edificaciones monumentales, es imponente la Torre de Rocasalva o de Sant Climent, la iglesia de Santa Maria, con sus ábsides románicos, y la casa de Can Terme, donde se encuentra el MEd’A (Museo Etnológico de Amer), que alberga la colección permanente Lluís Sidera y salas para exposiciones temporales.
Finalmente, la población atesora un patrimonio arquitectónico ferroviario único en Cataluña, fruto de la importancia que había adquirido la estación de Amer en la Ruta del Carrilet de Girona a Olot. Esta estación se destina a equipamientos turísticos y de información ciudadana y juvenil. El edificio y sus anexos son el centro de la vía verde más extensa de Girona.
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