Castillo de Sant Joan
En el año 1378, una sentencia daba la razón al obispo de Girona, señor feudal de Lloret de Mar, en el pleito que mantenía con los habitantes de la población, que se negaban a participar en las obras de reparación del castillo. Este había sido atacado por la flota genovesa, y el obispo consideraba que daba servicio a la población, al protegerla del enemigo.
Este mismo castillo, que en el siglo xi mandó construir Sicardis, la primera señora feudal de Lloret, sufrió otros daños, como los terremotos del siglo xv; el bombardeo de unos navíos cañoneros ingleses, en el año 1805, lo que significó su sentencia de muerte; el impacto de un rayo e, incluso, la acción de una máquina excavadora.
Sin embargo, fue excavado y consolidado, y hoy en día se puede visitar. Situado entre las playas de Lloret y Fenals, podemos visitarlo, pasear entre los restos de sus estancias y ascender por su torre reconstruida, que añade 15 metros a los 60 metros de acantilado sobre el mar sobre el que se elevan los restos de este castillo. Una imagen diferente de Lloret de Mar.